Ya hemos visto paredes
de dormitorios infantiles pintados con pintura pizarra, las cuales dan un toque desenfadado, divertido y distinto; pero no lo hemos visto tanto en cocinas como vamos a ver ahora.
Nos ayudará a dar ese toque especial, dinámico y a su vez nos servirá para anotar recetas, la lista de la compra y dejar notas a tu familia como: ¡compra el pan!. Y sobre todo para que los pequeños de la familia se entretengan mientras tú cocinas, que buena idea.
Esta pintura la puedes encontrar en cualquier tienda de pinturas de tu confianza, las podrás
encontrar en diferentes colores para las habitaciones infantiles como rosas,
verdes, turquesas todas preciosas pero la más común es la oscura, la negra que
imita a la pizarra de siempre.
Para no hacer de la estancia una zona oscura y sin luz, no se aconseja utilizarla en gran parte de la pared; si la quieres
poner en una habitación infantil hazlo tan solo en una pared o un pequeño detalle.
Y si la quieres poner en la cocina acompañadla con muebles
de color madera claro o blancos y en
zonas con luz, tampoco es aconsejable que lo pongas cerca de donde pueda ser
salpicado de agua o grasa, los rallones y la pintura se limpian con un trapo húmedo
o con jabón neutro.
Te dará un resultado fabuloso, pero eso si, combínalo con
colores claros y alegres, no hagas de una opción divertida una estancia agobiante.
Aquí dejo unas cuantas cocinas con pintura pizarra.
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